Un amarrido martes de marzo, Marcial Camarasa Martínez, marinero
cimarrón, martagón y marfuz, mareóse al tomar un amargo Martini y marció su
marlota amaranto.
Las margaritas del marjal enmarcaban la marmorosa marquesina
amarilla.
Un marabú amaró en el marbete de la marea.
Al calmar la marola, Marcial, sin margen para marrar, amartilló
el amarradero marrón, desamarró la maroma y se enmaró en la mar.
Mar maravillosa, mar inmarcesible, mar inmarchitable. Mar.
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