El Parque de Canalejas es el más antiguo de la ciudad de
Alicante. Fue proyectado en 1886 por el arquitecto González Altés. Posee varios
ejemplares de impresionantes ficus originarios de Australia con alrededor de 100
años de antigüedad. Pueden alcanzar un diámetro de treinta metros en la copa y
una altura de más de veinte metros. Los más longevos lucen bellísimas raíces
aéreas que se descuelgan majestuosas buscando la tierra. En los meses de verano
la densa sombra que proyectan protege al paseante de los rigores del calor. El parque
debe su nombre a Canalejas, político que tiene una estatua entre el parque y la
Explanada de España.
José Canalejas fue diputado por Alicante aunque nació en
Ferrol el 31 de julio de 1854. Niño prodigio, a los 10 años traducía del
francés y publicó una pequeña novela. En 1871 se licenció en Derecho y en
Filosofía y con 18 años obtuvo el doctorado en ambas facultades. Desde muy joven
dio muestras de una enorme capacidad oratoria auxiliada por su amplia cultura.
Se incorporó al Partido Liberal de Sagasta, fue diputado en
varias legislaturas, fue ministro de Fomento, de Gracia y Justicia, de
Hacienda, y de Agricultura, Industria, Comercio y Obras Públicas, este último
en dos periodos distintos. En 1893 adquirió el diario Heraldo de Madrid. En
1897 viajó a Cuba para conocer la situación de primera mano, se alistó
voluntario para combatir con 43 años y obtuvo la Cruz del Mérito Militar.
Regresó a Madrid para informar de la dramática situación a Sagasta que no
adoptó ninguna medida. Un año después Estados Unidos se apropió de Cuba, de
Puerto Rico y de Filipinas. En 1902 fundó su propio partido, el Liberal
Demócrata. Brillante orador y gran intelectual, publicó varios libros y
colaboró en prensa. Recibió numerosas condecoraciones, fue presidente del
Ateneo de Madrid, presidente de la Real Academia de Legislación y
Jurisprudencia, miembro de la Academia de Ciencias Políticas y Morales y de la
Real Academia de la Lengua. Ocupó la Presidencia del Consejo de Ministros desde
el 9 de febrero de 1910 hasta el día de su asesinato, el 12 de noviembre de
1912. Estaba mirando el escaparate de una librería en la Puerta del Sol de
Madrid y el anarquista Manuel Pardiñas
le disparó hasta matarlo. Canalejas no era amigo de llevar escoltas pero ese
día sí la llevaba y no reaccionaron a tiempo. Solo consiguieron rodear al
asesino tras el atentado y parece que al verse sin escapatoria se suicidó,
aunque hay diferentes versiones. El crimen provocó que no pudiera finalizar las
reformas políticas que había emprendido para modernizar y democratizar el país.
Las comparaciones son odiosas, así que mejor no confrontar el
currículo de Canalejas con lo que tenemos en la actualidad. Mejor disfrutar de
la sombra de los ficus.